Permitiendo desplegar miles de módulos en una única infraestructura de miles de núcleos, esta arquitectura de analítica y monitorización embebida va más allá del núcleo.
La británica UltraSoC ha anunciado la expansión de su arquitectura de analítica embebida, permitiendo a los diseñadores la incorporación de funcionalidades dirigidas por los datos en sus productos.
Dicha arquitectura se dirige a los sectores de las industrias de la automoción, el almacenamiento, y la computación de alto rendimiento, que gracias a ella pueden integrar una seguridad basada en hardware más sofisticada, capacidades de perfeccionamiento de rendimiento y seguridad incorporadas, así como ofrecer beneficios sustanciales en el tiempo necesario para su lanzamiento al mercado, y en la relación coste/beneficio de utilizar esta arquitectura en el ciclo de desarrollo de un SoC.
Las nuevas funcionalidades permiten a los diseñadores de SoCs incluir monitorización embebida en el chip y sistemas de análisis con hasta 65.000 elementos, facilitando el soporte para sistemas con varios miles de procesadores.
Futuras iteraciones permitirán, incluso, una mayor cantidad de procesadores para sistemas Exascale. Además de esta gran escalabilidad, el nuevo SMB (System Memory Buffer) IP permite la infraestructura de analítica embebida para manejar los altos volúmenes de datos generados por sistemas multinúcleo.
La nueva arquitectura de analítica y monitorización embebida de UltraSoC es capaz de llevar a cabo la monitorización de un número ilimitado de bloques de construcción que constituyen los productos SoC más complejos, y de analizar el impacto en el comportamiento a nivel de sistema.
Estos chips multinúcleo heterogéneos están siendo cada vez más habituales, particularmente en aplicaciones de inteligencia artificial y machine learning que están destinadas a trabajar, por ejemplo, en vehículos auto conducidos.
Futuro para la nueva arquitectura de analítica y monitorización
Pero las posibilidades de esta arquitectura van más allá de la monitorización y la analítica a nivel de sistema, extendiéndose más allá de los componentes de núcleo de procesamiento del chip hacia todas las partes del sistema, entre las cuales se incluyen miles de bloques IP y subsistemas, buses, interconexiones, y software.
Las nuevas funcionalidades permiten a los diseñadores desplegar decenas de miles de módulos de monitorización y análisis en una infraestructura única, los cuales proporcionan un análisis coherente e integrado del comportamiento del sistema.
